Uno de los libros mas curiosos que me he encontrado, referido al cabello, se titula LA CABELLERA FEMENINA – un dialogo entre poesía y pintura. Trata este libro de la inspiración que ha ejercido el cabello femenino en pintores y poetas, y hace un largo recorrido a través del tiempo, desde la mitología griega hasta nuestros días. Para los profesionales de la peluquería es importante que disciplinas como la historia del arte se ocupen de la cabellera femenina, ya que nos ofrece puntos de vista insólitos sobre los múltiples simbolismos del cabello femenino.
Lady Godiva, una cabellera mítica
Nos describe Erika Borsay en su obra, algunos de los mitos más importantes, en los que el cabello ha tenido un papel destacado. Uno de ellos es el de Lady Godiva, y fue el poeta Tennyson quien con su poema Godiva, escrito en 1842, hizo de esta leyenda una de las mas populares del folclore inglés.
“Según quiere la tradición esta heroína del siglo XI, dada en matrimonio al conde de Chester, conocedora de los sufrimientos de sus súbditos de Coventry, solicitó de la generosidad de su marido una disminución de los tributos que los abrumaban. Ante su calurosa suplica, este finalmente accedió, si bien bajo el requisito de aceptar una procaz apuesta; satisfaría los deseos de su esposa a cambio de que ella atravesara la ciudad totalmente desnuda… dando pruebas de gran ingenio y decisión, deshizo las trenzas que la recogían en dos, despojóse de todos sus ropajes y procedió a cubrir su cuerpo desnudo con sus deslazadas guedejas de oro. Se subió a un caballo y en silencio recorrió la ciudad. Se cuenta que sus súbditos, como acto de admirado respeto, se encerraron en sus casas al paso de la noble y admirable dama que naturalmente ganó la apuesta al conde de Cheste”.
Berenice, una cabellera de estrellas
Otra curiosa historia que se relata en este libro es la de una pequeña constelación, de unas veinte estrellas, llamada La cabellera de Berenice.
“Magas, soberano de Cirene (actualmente Libia), unió en matrimonio a su hija Berenice II con Tolomeo Everguerata, rey de Egipto. Con motivo de una expedición guerrera de éste a Siria para vengar la muerte de una hermana, Berenice, que lo amaba tiernamente, hizo el voto de ir al santuario de Afrodita y ofrecerle su larga cabellera si Tolomeo regresaba a su lado sano y salvo. Al día siguiente de este sacrificio, la mata de pelo había desaparecido del templo. Según el relato de Conon, el astrónomo de la corte, la hermosa melena había ascendido al firmamento donde había formado una nueva constelación que fue bautizada con el nombre La cabellera de Berenice, afirmando que los dioses habían colocado los cabellos de la reina en el lugar que les correspondía: el cielo”.
¡Menudas historias! ¿Verdad? Cuánto da de sí una bella cabellera… A nosotros, debemos confesar, nos fascinan estos relatos. ¿Cuál te ha gustado más? ¿Conoces algún otro?
Fuente: “La cabellera femenina – un dialogo entre poesía y pintura”. Por Erika Bornay. Editorial Cátedra, Madrid 1994